El Ayuno en el Islam
En el Islam, el ayuno significa abstenerse de comer, beber y tener relaciones sexuales desde el amanecer hasta el atardecer durante el mes de Ramadán; no es solo una práctica corporal, sino también controlar la lengua, la ira y evitar el despilfarro. El objetivo es fortalecer la voluntad, valorar las bendiciones y recordar la privación de los demás.
Los musulmanes toman el sahur por la mañana y rompen el ayuno con el iftar por la tarde; el iftar es a menudo un momento de compartir y solidaridad. A los enfermos, ancianos, mujeres embarazadas o lactantes, y viajeros se les concede facilidad; quienes no puedan ayunar lo compensan después o apoyan a los necesitados mediante fidya.
El ayuno no es solo hambre, sino un acto de purificación del corazón y de desarrollo de la empatía social. El Profeta Muhammad resumió esto con sus palabras: “Quien dé de comer a un ayunante para romper su ayuno, recibirá una recompensa equivalente a la del ayunante, sin que la recompensa del ayunante disminuya en nada.” (Tirmidhi, Savm, 82)
